Empecemos conociendo un poco el origen de estos veleros. en primer lugar ¿qué era un falucho?
La palabra falucho, que algunos tratadistas navales dicen proviene del árabe fulkan (barca), define en sí a una embarcación típicamente mediterránea cuyos orígenes se le suponen en la «bilancella» napolitana, modificada por los españoles al añadirle una pequeña vela de mesana también latina, parecida a la que empleaban los jabeques mediterráneos.
Se trata por tanto de un barco de vela pequeño (por lo general, pueden llevar una docena de pasajeros, más un par de personas como tripulación), que puede tener una o dos velas casi triangulares, y uno o dos mástiles ligeramente inclinados hacia la proa.
Después de la guerra de Independencia de las colonias americanas de España, desaparecieron los barcos de marina mercante en la península, sólo quedaban pequeños veleros de cabotaje deseando restablecer la navegación con las Antillas.
A través del Real Decreto de Carlos III, se restablece el comercio con las colonias que seguían fieles.
El falucho San Juan, el denominado posteriormente “El Glorioso” por sus proezas, fue el que realizó el primer viaje haciendo las veces de correo.